La Bahía de Cádiz es un territorio con un significativo peso y relevancia por su situación geoestratégica. En este espacio se ha generado una aglomeración urbana de carácter policéntrico que alcanza unas dimensiones considerables (alrededor de 650.000 habitantes). Se trata de identificar cómo debe posicionarse la Bahía y hacia qué modelo territorial y productivo debe evolucionar con objeto de dar respuesta a los retos y oportunidades de futuro.
Son algunas de las ideas que presiden la justificación y la estrategia del Plan para la Mejora de la Competitividad y el Desarrollo de la Bahía de Cádiz 2007-2013, aprobado por la Junta de Andalucía en noviembre de 2007. El Foro de Debate Cádiz 2012, desde su Manifiesto inicial y a través de todos sus actos y publicaciones, ha expresado opiniones y presentado proyectos muy en sintonía con aquellas.
La conmemoración del Bicentenario de la Constitución es una oportunidad única, desde luego la mejor desde el comienzo de la transición democrática, para impulsar decisivamente la modernización de Cádiz. Desde esta óptica, las Actuaciones del Plan en infraestructuras viarias resultan incuestionablemente limitadas. Las infraestructuras que Cádiz-Bahía necesita para abordar con soltura la segunda década del siglo XXI son más ambiciosas, como viene propugnando el Foro de Debate Cádiz 2012: el cierre del anillo viario mediante el túnel bajo la Bahía, articulando sus centros urbanos y liberando a Cádiz-capital de su condición de fondo de saco; la comunicación directa Cádiz-Chiclana por la costa; el anillo ferroviario bimodal metro-cercanías; la revisión del modelo de puerto marítimo.
Una actuación estrella del Plan es la urbanización del Polígono de las Aletas, que nace con una doble vocación, logística y científico-tecnológica. Nace también con una debilidad: no podrá otorgarse la propiedad del suelo a las empresas que allí se asienten, que lo harán en régimen de concesión; así empezó el Parque Tecnológico Cartuja 93 en Sevilla, aunque posteriormente este aspecto fue corregido con éxito.
En su gestión participan las Administraciones Central y Autonómica y el Ayuntamiento de Puerto Real en solitario. Es muy sintomática la ausencia de los otros Ayuntamientos de la Bahía, cuya implicación es imprescindible en un proyecto que se anuncia como foco de desarrollo tecnológico e industrial de la Bahía de Cádiz: la Metrópolis Bahía está mucho más retrasada en lo formal-institucional que en lo social.
El Plan Bahía Competitiva asume las actividades logísticas como sector de futuro, y las vincula al Área de Las Aletas; a partir de esta Zona de Actividades Logísticas y de adecuadas instalaciones portuarias en La Cabezuela, a pie de autopista y de ferrocarril y con aeropuerto cercano, la Bahía de Cádiz empezaría a estar capacitada para aprovechar su posición estratégica en el denominado “nodo” del Estrecho, como propugna el Foro de Debate Cádiz 2012.
Las actividades tecnológicas son el otro polo del Plan. El Parque Tecnológico de Andalucía, en Málaga, y Cartuja 93, en Sevilla son referentes bien cercanos; ambos se orientan al sector de la Tecnología de la Información y las Comunicaciones (empresas TIC), el empleo directo y la producción crecen de forma muy notable. El de Málaga ha conseguido además ser la sede de las Asociaciones Nacional e Internacional de Parques Tecnológicos. Sus empresarios y el Ayuntamiento pretenden ahora convertir a Málaga en la más importante zona de excelencia tecnológica de Europa, emulando al Silicon Valley californiano.
El Parque Tecnológico de las Aletas marca su futuro en la Biotecnología y en las Energías Renovables; es bueno que así sea, diversificando el equipamiento científico-tecnológico andaluz y evitando la competencia directa con sus vecinos. La urbanización del Parque por sí sola no resuelve gran cosa, lo importante es dotarle de contenido. Prueba de ello es que estando España entre los países de Europa con más Parques Tecnológicos, su situación en tecnología y en investigación es todavía de gran retraso.
La presencia de la Universidad en el Parque Tecnológico es imprescindible, ya que se trata de generar empleo a través de la promoción de la investigación, tanto universitaria como de otros centros, y de la “incubación” de empresas de base tecnológica. Es alentador verificar que el Plan contiene numerosas Actuaciones en relación con la Universidad de Cádiz: mejora de la investigación orientada hacia el sector industrial, fomento de la emergencia de proyectos de I+D+i, creación de un referente de conocimiento y formación a escala internacional vinculado a las Ciencias del Mar, colaboración con las industrias farmacéutica, química y agroalimentaria y con las empresas de energías renovables, y un largo etc.
El éxito no está asegurado, aunque la oportunidad de coincidir con la apuesta del gobierno central por la tecnología y la investigación, es única; la administración regional tiene las claves, pero la sociedad civil y las administraciones locales deben implicarse también; los 650.000 habitantes de la Bahía ya constituyen masa crítica suficiente.
El Foro de Debate Cádiz 2012 ha acuñado el concepto “Bahía de la Biotecnología”: a partir del sustrato que forman las industrias alimentarias gaditanas, determinadas especialidades de la Universidad de Cádiz y los Centros de Investigación existentes, desarrollar un polo de tecnología y de industrias de última generación en distintas especialidades de la Biotecnología.
También el Foro de Debate Cádiz 2012 ha planteado la construcción en terrenos de la Bahía de una Central Termosolar, que además de generar energía renovable próxima a los centros de consumo constituya en sí un centro de investigación en la materia. Si las Aletas ha declarado como otra especialidad las Energías Renovables, ligar al Parque Tecnológico una Central de Producción próxima daría lugar a sinergias muy singulares.
Cádiz necesita de actuaciones logísticas y tecnológicas como las previstas en el Plan Bahía, y necesita mucho más si se pretende que el 2012 constituya, más allá de la conmemoración y del festejo, la renovación y la modernización de la metrópolis, su incorporación a la sociedad del conocimiento.
Publicado en La Voz de Cádiz. 03.05.08